Recuerda que el cabello no puede crecer de la noche a la mañana.  Normalmente, el cabello solo crece entre 0,6 y 1,2 centímetros al mes, así que ten paciencia.

Fortalece tu cuero cabelludo con masajes capilares.  Según un estudio reciente, se ha demostrado que los masajes capilares diarios aumentan el grosor del cabello.

Enjuágate con agua fría al final de cada ducha.  El agua fría suaviza la capa exterior del cabello, lo que ayuda a evitar la pérdida de humedad, los enganches y el daño por calor. Solo necesitas hacerlo durante unos segundos, pero con el tiempo puede marcar una gran diferencia.

Usa acondicionador cada vez que te laves el cabello con champú . El acondicionador ayuda a reemplazar los lípidos y las proteínas dentro del tallo del cabello, “además de sellar la cutícula para ayudar a prevenir que se produzcan más daños y así lograr que tu cabello crezca más y luzca más saludable.

El crecimiento del cabello comienza con una dieta saludable.  Alimentos como el salmón están repletos de ácidos grasos omega-3 y omega-6, así como de antioxidantes que pueden reducir la caída del cabello y aumentar su densidad. Otra opción de proteína vegetal son las legumbres, que aportan otros nutrientes beneficiosos para el cabello, como hierro, biotina y ácido fólico.

Considere probar suplementos para el cabello.  Su cuerpo necesita muchos nutrientes vitales para crear cabello nuevo. Preste atención a su dieta, porque si bien una dieta equilibrada ayuda, es posible que no esté obteniendo la cantidad adecuada de todos los nutrientes necesarios para crear un cabello saludable y resistir los daños ambientales. Por lo tanto, considere tomar suplementos diseñados científicamente como Forti5.